Nuevamente el despertador sonó muy temprano. Ésta vez la culpa la tenía la conexión de trenes y buses que necesitábamos hacer esa mañana.
Si queríamos poder ver algo de Ise sin perder los enlaces, no quedaba otra.
Y, teniendo en cuenta que Ise es uno de los centros mas importantes en el culto del sintoísmo, no queríamos irnos sin intentar ver alguno de sus santuarios.
El llamado Gran Santuario de Ise es en realidad un cúmulo de muchos santuarios, mas de cien, entre los cuales destacan dos: el santuario interior Naikū, dedicado a la diosa del sol Amaterasu (deidad mas venerada en esta religión) y el santuario exterior Gekū, dedicado a Toyouke-Ōmikami, deidad guardiana de la comida y la ropa de Amaterasu.
Por desgracia, el santuario interior está alejado de la estación, así que tuvimos que conformarnos con visitar el exterior o Gekū.
Si queríamos poder ver algo de Ise sin perder los enlaces, no quedaba otra.
Y, teniendo en cuenta que Ise es uno de los centros mas importantes en el culto del sintoísmo, no queríamos irnos sin intentar ver alguno de sus santuarios.
El llamado Gran Santuario de Ise es en realidad un cúmulo de muchos santuarios, mas de cien, entre los cuales destacan dos: el santuario interior Naikū, dedicado a la diosa del sol Amaterasu (deidad mas venerada en esta religión) y el santuario exterior Gekū, dedicado a Toyouke-Ōmikami, deidad guardiana de la comida y la ropa de Amaterasu.
Por desgracia, el santuario interior está alejado de la estación, así que tuvimos que conformarnos con visitar el exterior o Gekū.