Este día estaría marcado por la herencia cultural China que tiene Nagasaki, y cuya comunidad celebraba uno de los grandes festivales de la ciudad: el
Lantern Festival, que conmemora el año nuevo chino.
Durante 15 días, la ciudad se engalana con miles de farolillos de papel y,
aunque el barrio chino es el escenario principal y donde hay más concentración
de esos farolillos, los podremos ver por toda la ciudad.
No solo en su forma redonda tradicional, sino también como diferentes estatuas
de todos los tamaños.
Así pues, durante nuestros paseos por el día, empezamos a ver algunos de
ellos, pero nada nos preparó para la exuberancia de la noche.